Eres penumbra que acaricia la obscuridad.
Diseñaste un hilo especial con fibras fabricadas con la
ceda que produce la oruga que utiliza como capullo tu corazón y con ellas
suturas heridas que se mantenían abiertas, no te importo que pasaran los días y
solo compartiéramos amistad; aunque tú no lo sabías, le diste sentido a las
horas del día, deje que mis sentimientos vagaran en la bitácora de mi
indiferencia, pero ahora eres bálsamo que da vida a las manecillas del reloj.
Hay mañanas y noches que dejan huella sustituyendo cicatrices y la soledad
se aburre sin mi compañía, mientras tú me sigues dando razones para decirte en
poesía que pintas penumbra donde solo había oscuridad.
Sembraste murmullos en
mi alcoba, donde solo gritaba el silencio. Llenaste el espacio
vacío en mi corazón y desterraste al ermitaño que habitaba en el, ahora es el
estudio donde fabrico sueños.
Derechos de autor: Juan Hernandez.
HTTP://WWW.SAFECREATIVE.ORG/WORK/1710144563659
Derechos de autor: Juan Hernandez.
HTTP://WWW.SAFECREATIVE.ORG/WORK/1710144563659
Comentarios
Publicar un comentario