Nunca dejes de cantar mi hermosa musa.
Cuando
el corazón deja de escuchar a su musa, la piel duerme y los sentidos se
afligen, se mutilan los sentimientos y el amor no fluye, el alma se queda vacía
a la espera de ser alimentada por sentimientos que metabolizar para
producir el combustible que activa al corazón.
Yo escucho a mi musa, que
mantiene mi piel despierta, le da calma a mis sentidos y siembra
sentimientos en mi alma para que nunca deje de fluir el amor del que se
alimenta mi corazón.
Nunca dejes de cantar mi hermosa musa.
Derechos de autor: Juan Hernandez.
HTTP://WWW.SAFECREATIVE.ORG/WORK/1710063791324
Derechos de autor: Juan Hernandez.
HTTP://WWW.SAFECREATIVE.ORG/WORK/1710063791324
Comentarios
Publicar un comentario